Se me habían ocurrido un par de historias para escribir pero he tenido poco tiempo para escribir. Poco tiempo y pocas ganas para ser sincero. Esta cosa de blog está a poco más de un mes de cumplir tres años y me pregunto como ha durado tanto siendo yo un tipo que se aburre de todo, tanto de situaciones como de personas, fácilmente. Como ha sobrevivido casi tres años con un diseño mediocre y con contenido esporádico y demasiado heterogéneo para ser encasillado ( ¿ o no?). Creo que estos tres años habrá un par de escritos que tengan algo de originalidad o un pequeño brillito de buena escritura, el resto son cosas escritas completamente olvidables.
Como se habrán podido percatar mis estimados lectores no acostumbro escribir de mi vida privada, principalmente por que creo que mi vida es lo bastante aburrida como para ser contada y aburrir al resto de la humanidad con mis pequeñeces sería una maldad muy grande. Pero ahora contaré uno de los motivos que me ha hecho alejarme un tanto del mundo de los blogs, dejando de escribir y de visitar sus respectivos blogs. Resulta que en una semana más iniciaré lo que espero sea una gran aventura para mí, aventura que espero resulte positiva y exitosa en el sentido amplio de la palabra.
Resulta que en una desición que aún no me lo explico quedé seleccionado en una beca increíbe para estudiar un magíster en la Universida de Chile, la cual si toda va bien me tendría el próximo año en alguna univerdiad de USA, UK o Australia. El proceso de selección fue duro, con muchas pruebas de diverso tipo en que de aproximadamente 600 postulantes quedamos finalmente 50, todos postulantes de excelencia académica.
Esta beca me significó renunciar a mis trabajos que estaba realizando, a mis diversos compromisos profesionales y a lanzarme el piscinazo de dedicarme por entero al estudio ( la beca incluye un "sueldo" mensual para vivir tranquilo) y dejar todo para radicarme, para bien o para mal, en la capital. Como muchos se habrán dado cuenta leyéndome soy un provinciano orgulloso que siempre le ha hecho el quite a la capital y especialmente a los capitalinos, entidades que mucha estima no les tengo, aunque claro, estoy generalizando. Lo riesgoso de todo esto es que si me empieza ir mal me quitan la beca y hasta ahí llegaron los sueños de Alvarito de conocer los canguros, obligándome a volver con la cola entre las piernas a suplicar por una reincorporación labral incierta. Así que al parecer mi tiempo libre desde el próximo mes se harán mínimos y mi mente estará 110% involucrada en otra cosa, de ahí que si me desaparezco un tiempo de los blogs es por esta razón, y si me desaparezco por un par de meses, háganle un funeral como corresponde a este bicho que ya va para sus tres años de ser parido una gris tarde de domingo en un momento de angustia y ociosidad.
Y eso sería. Si alguien en el metro o en alguna esquina de Santiago sienten a un individuo de ki desvariado puede que sea yo. Capaz, en una de esas, el tipo de lentes y mirada medio perdida en el universo extrañando a la lechuza que canta en las noches sea su servidor.
Como se habrán podido percatar mis estimados lectores no acostumbro escribir de mi vida privada, principalmente por que creo que mi vida es lo bastante aburrida como para ser contada y aburrir al resto de la humanidad con mis pequeñeces sería una maldad muy grande. Pero ahora contaré uno de los motivos que me ha hecho alejarme un tanto del mundo de los blogs, dejando de escribir y de visitar sus respectivos blogs. Resulta que en una semana más iniciaré lo que espero sea una gran aventura para mí, aventura que espero resulte positiva y exitosa en el sentido amplio de la palabra.
Resulta que en una desición que aún no me lo explico quedé seleccionado en una beca increíbe para estudiar un magíster en la Universida de Chile, la cual si toda va bien me tendría el próximo año en alguna univerdiad de USA, UK o Australia. El proceso de selección fue duro, con muchas pruebas de diverso tipo en que de aproximadamente 600 postulantes quedamos finalmente 50, todos postulantes de excelencia académica.
Esta beca me significó renunciar a mis trabajos que estaba realizando, a mis diversos compromisos profesionales y a lanzarme el piscinazo de dedicarme por entero al estudio ( la beca incluye un "sueldo" mensual para vivir tranquilo) y dejar todo para radicarme, para bien o para mal, en la capital. Como muchos se habrán dado cuenta leyéndome soy un provinciano orgulloso que siempre le ha hecho el quite a la capital y especialmente a los capitalinos, entidades que mucha estima no les tengo, aunque claro, estoy generalizando. Lo riesgoso de todo esto es que si me empieza ir mal me quitan la beca y hasta ahí llegaron los sueños de Alvarito de conocer los canguros, obligándome a volver con la cola entre las piernas a suplicar por una reincorporación labral incierta. Así que al parecer mi tiempo libre desde el próximo mes se harán mínimos y mi mente estará 110% involucrada en otra cosa, de ahí que si me desaparezco un tiempo de los blogs es por esta razón, y si me desaparezco por un par de meses, háganle un funeral como corresponde a este bicho que ya va para sus tres años de ser parido una gris tarde de domingo en un momento de angustia y ociosidad.
Y eso sería. Si alguien en el metro o en alguna esquina de Santiago sienten a un individuo de ki desvariado puede que sea yo. Capaz, en una de esas, el tipo de lentes y mirada medio perdida en el universo extrañando a la lechuza que canta en las noches sea su servidor.